[8. Sobre tiempo en general: el tiempo en la
Tierra y en el espacio - sobre edades de hombres y de
dioses]
El el salmo 89,4 [de la
biblia] se alaba al Altísimo con palabras enfáticas:
<... porque mil años
son ante tus ojos como el día que ayer transcurrió y
como una vigilia nocturna...> (p.56)
El fenómeno de la
dilatación del tiempo
¿Contradicciones? ¿Cosas incomprensibles? No. La ciencia
ha demostrado ya desde hace mucho que en los vuelos
interplanetarios a grandes velocidades se dan tiempos
totalmente diferentes. En una astronave que se desplace a
una velocidad próxima a la de la luz, el tiempo transcurre
mucho más lentamente que en el planeta de origen, donde
corre muchísimo más de prisa. Por medio de la velocidad
(p.56)
y la energía el tiempo puede manipularse. La dilatación
del tiempo, nombre que se da a esas diferencias, no ha
sido descubierta hasta nuestra época, pero se trata de una
"ley", y por lo tanto los "dioses" pudieron también hacer
uso de ella si la conocían.
Si se imprimiera a una nave espacial una aceleración
constante de 1 g (1 g = 9,81 m./seg.
2),
y
a la mitad de su trayecto frenara con la misma fuerza de 1
g, se darían entre la tripulación del cohete y los
habitantes que habían permanecido en tierra las siguientes
diferencias de tiempo:
Años para la tripulación del cohete
|
Años para los habitantes de tierra
|
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1
2
5
10
15
20
25
30
35
40
45
50
|
|
1,0
2,1
6,5
24
80
270
910
3.100
10.600
36.000
121.000
420.000 |
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de Däniken: El mensaje de los dioses, p.57
|
Esta tabla, que reproduce Meyer en su [libro en alemán]
"Handbuch über das Weltall" (Vademécum del universo), pone
de manifiesto las enormes diferencias de tiempo que se dan
entre una nave espacial y su planeta de origen en viajes
de muy larga duración. Las consecuencias son realmente
fantásticas: para la tripulación de una astronave
acelerada al ritmo de 1 g transcurre el ridículo lapso de
40 años en un período que en la Tierra dura 36.000.
Conociendo esto se comprende fácilmente que los "dioses",
en comparación con los hombres, parezcan "inmortales". Y
si esta ley tiene aplicación efectiva, ¿no podríamos
suponer que los profetas del Antiguo Testamento: Elías,
Moisés, Esdras, a quienes en premio a sus servicios en la
Tierra los "dioses" se llevaron consigo en una astronave,
viven todavía? Es, pues, verosímil que pueda hablarse de
un retorno. En mi agenda queda todavía sitio para una
entrevista con papá Moisés. Pero, pregunto ahora en serio,
¿no podemos AÚN aprenderlo todo de las bibliotecas
secretas que existen en nuestro mundo?
El prohibido "Libro
Cuarto" de Esdras acaba con estas palabras:
<Entró entonces Esdras en éxtasis (p.57)
y fue arrebatado a la morada de sus compañeros después
que hubo escrito todo esto. A él se le llama EL ESCRITOR
DE LA CIENCIA DEL ALTÍSIMO.>
