Banco de datos WB 444 -
Una nación con pasaporte Nansen - Descubridores
del minuto, inventores del carro con ruedas - Retrato
robot de los desconocidos - Diez reyes primitivos en la
WB 444 - De la edad bíblica y de la inmortalidad
- ¿Bebieron de la misma fuente? - La hierba de la
inmortalidad - Tres especulaciones
[El origen de los sumerios no es cierto - los
reyes fueron dioses respectivamente extraterrestres]
Banco de datos WB 444
Lista de los reyes sumerios "WB 444" [1]
[Diversas enciclopedias
indican que el origen de los Sumerios no es definido]
Las grandes obras de consulta, como los diccionarios y las
enciclopedias, tienen para nosotros los consumidores
normales esa gran ventaja: que ponen a nuestra
disposición todo el saber científicamente
probado, siempre puesto al día y de la manera
más breve y concisa posible, sin lujo de
innecesarios detalles ni controversias.
Buscando el artículo "sumerios" en diferentes obras
del tipo mencionado, a título de experimento, he
encontrado en tan sesudos libros las siguientes
informaciones:
<Sumerios, habitantes
del país de los dos ríos (Mesopotamia)
situado entre la actual Bagdad y el Golfo
Pérsico. Pueblo de raza desconocida, pero
individualizado por su idioma a partir del milenio
tercero a.d.C. HASTA LA FECHA (p.224)
SE IGNORA cuándo y de dónde llegaron los
sumerios a Babilonia, es decir, a la región
situada entre los ríos Tigris y
Éufrates.>
O bien:
<Sumerios, los
habitantes de la Mesopotamia central y meridional entre
los milenios cuarto y segundo a.d.C.>
O bien:
<El origen del pueblo
sumerio es INCIERTO. Quizá llegaron de las
montañas orientales, o tal vez procedían
del mar. LO ÚNICO QUE SE SABE
históricamente es que estaban afincados en
Mesopotamia desde los tiempos más remotos.>
Sumerios, mapa [2]
[El asiriólogo
Oppert detecta la nación de los sumerios leyendo
inscripciones cuneiformes]
Una nación con
pasaporte Nansen
Estamos de acuerdo: por ahora, nadie sabe de dónde
procedía ese pueblo. El que sus huellas no hayan
sido borradas por el viento de los milenios, se debe
únicamente a la inteligencia de esos "primeros
portadores de pasaporte Nansen" (El pasaporte Nansen es un
salvoconducto que se concede a refugiados y
apátridas). Ellos inventaron los cuarenta y dos
signos de la escritura cuneiforme. La tradición
oral se pierde, pero lo escrito ha perdurado:
En excavaciones realizadas al sur de Bagdad se hallaron
más de treinta mil tablas de arcilla procedentes de
la época sumeria.
¡Lo más grotesco y misterioso es que hace
apenas cien años, ni siquiera conocíamos el
nombre de Sumer! Fue el asiriólogo Jules Oppert,
nacido en Hamburgo en 1825 y fallecido en Paris en 1905,
quien reveló la existencia del país de Sumer
cuando logró descifrar las inscripciones
cuneiformes, en 1869.
Ese maestro
Jules Oppert
(Julius Oppert) [3]
descubrió leer la escritura cuneiforme.
Primero la
escritura fue con pictogramas (1),
después siguió la forma de la
dinastía de los reyes "Hammurapi" (2),
después fue la versión de Asiria
(3), y al fin la forma de Nabucodonosor II (4)
[web01].
Y los textos salieron así (aquí
la lista de reyes):
Escritura cuneiforme con la lista de reyes
[5]
|
Escritura
cuneiforme de los sumerios, desarrollo y
ejemplos, tabla [4]
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|
Descubridores del minuto,
inventores del carro con ruedas [y más
invenciones por los sumerios]
|
Samuel Noah
Kramer, retrato de otro maestro
asiriólogo [6]
Ciudades
sumerios principales, mapa 01 [7]: Ur,
Eridu, Larsa, Kutallu, Uruk, Bad Tibira,
Girsu, Nina, Urukag, Lagash, Umma, Adab
Lagash, Shurruppak, Kissura, Isin,
Pazurish-Dagan, Nippur, Marad, Bilbat,
Barsippa, Babilonia, Kish, Larak, Kid-nun,
Kutha, Akshak, Sippar, Rapiqum, Tutub,
Eshnunna, Der.
Ciudades
sumerios principales, mapa 02 [8]: Ur,
Larsa, Uruk, Isin, Nippur, Borsippa, Suse,
Kish, Sippar, Der, Dur-Kurigalzu, Eshnunna,
Nuzi, Arrapha, Assur, Ninive, Qattara,
Dur-Katlimmu, Terqa, Mari.
Los sumerios tenían sellos
cilíndricos para dejar moverlos en
arcilla y salieron relieves en arcilla:
Sello
cilíndrico con vacuno con trigo [9]
|
|
Las descripciones de las
tablas de arcilla revelaron al profesor (p.225)
Samuel Noah Kramer, asiriólogo de la
universidad de Pennsylvania, que las conquistas
técnicas de los sumerios incluían el carro
con ruedas y la navegación a vela. Supo
también que eran administrados por una eficiente
organización de funcionarios, y que todavía
hoy nos sirven los conocimientos astronómicos que
ellos aportaron (¿de dónde los
habrían sacado?, me pregunto): ellos establecieron
la división del tiempo "desde el minuto de sesenta
segundos hasta el año solar".
Mientras Europa se hallaba sumida todavía en pleno
neolítico, a los sumerios se les había
ocurrido ya el procedimiento ideal para legalizar
facturas, documentos y cosas por el estilo: un sello
oficial. Inventaron el sello cilíndrico, una
estampilla de sólo dos a seis centímetros de
longitud, que solían llevar colgando de una cadena
al cuello, para tenerlo siempre a mano. Los recaudadores
de impuestos empleaban uno de estos sellos para certificar
el cobro. En los cuatro mil años transcurridos
desde su invención, el sello ha adquirido un
prestigio insuperable. ¡Ah! ¡Esos sumerios!
[¿De qué
raza fueron los sumerios?]
¿Cómo podríamos dibujar hoy el
retrato-robot de aquellos desconocidos?
Color del cabello: muy negro. Algunas inscripciones se
refieren a ellos llamándoles "cabezas negras".
Raza: Antes de que se afincasen los sumerios entre el
Éufrates y el Tigris, habitaban allí
diversas tribus semitas. Pero ellos, indiscutiblemente, no
eran semitas, ni tampoco de origen negroide. Los perfiles
de los bajorrelieves sumerios presentan rasgos
indoeuropeos; la región dominada por ellos
debió ser muy extensa, si hemos de creer la
siguiente anotación de Sir Arthur Keith:
<Los rasgos faciales de
los sumerios de la Antigüedad aún pueden ser
observados en Oriente entre los habitantes del
Afganistán y el Beluchistán hasta el valle
del Indo, a unos dos mil cuatrocientos kilómetros
de distancia.> (nota 43:Woolley, Sir Charles L.: Ur
in Chaldäa; Wiesbaden 1956)
[¿Quién
enseñó a los sumerios?]
¿Fundadores de la
civilización?
Cualquiera que fuese su origen, lo que han demostrado las
investigaciones actuales es que cuando llegaron
traían consigo, por lo visto, una cultura en estado
de madurez y una civilización completa. Ello les
confería tal superioridad sobre las (p.226)
tribus circundantes, que éstas no pudieron
oponérseles y desaparecieron del mapa
étnico.
Ellos no dejaron de darse cuenta de esta superioridad
propia, por lo que se presentaban en numerosas
cosmogonías como "los verdaderos creadores de la
civilización", como hombres creados para honrar a
los dioses dispensadores de vida (nota 44: Parrot,
Abré: Sumer; Munich 1960). "Con ayuda de sus
dioses, sobre todo de Enlil, el "rey del cielo y de la
tierra", los sumerios transformaron un país llano,
agostado y azotado por los vendavales en un imperio
fértil y floreciente" (Kramer).
¿Cómo es posible que - por lo menos cuatro
mil años a.d.C. - surgiese de la nada una cultura
en pleno desarrollo? ¿De dónde sacaron sus
conocimientos los sumerios?
¿Quién les enseñó todo lo que
sabían de urbanismo? (¿Acaso un cursillo de
formación acelerada?)
¿Quién les enseñó a organizar
con eficiencia sus doce ciudades-Estado?
¿De dónde tomaron sus conocimientos de
ingeniería, gracias a los cuales canalizaron su
país? De este modo protegían las cosechas,
evitando los tremendos desbordamientos del
Éufrates, que antes solían dar lugar a
inundaciones.
¿Cómo adquirieron su ciencia
matemática - comprobable en los textos de las
tablillas que nos han dejado -, que les permitía
calcular cuadrados, cubos, números
recíprocos, raíces y potencias superiores, e
incluso tripletes de números pitagóricos,
así como calcular el área del círculo
y de los diferentes polígonos? ¿Todo eso en
el milenio tercero a.d.C.? ¿Quién les
sugirió que el círculo debía
dividirse en trescientos sesenta grados?
¿Quién les enseñó tan
conveniente unidad de medida?
Estos testimonios de la historia sumeria pueden verse hoy
en los centros de excavaciones del país de los dos
ríos, o también entre los "botines" de las
grandes colecciones, como la del British Museum de Londres
o el Louvre de París. Son impresionantes.
[¡Faltan huellas de
las migraciones de los sumerios!]
En mi opinión, si los sumerios hubiesen llegado a
Mesopotamia después de una larga
peregrinación, tal como se venía suponiendo,
es forzoso que hubieran dejado huellas de su
técnica, su cultura y su religión. Y no hay
tales. Si las hubiera, nos serviría para saber de
dónde partieron.
Algunos arqueólogos opinan que los sumerios no
procedían de ningún otro lugar, sino que se
"desarrollaron" en su propio país de origen, entre
Bagdad y el Golfo Pérsico. Efectivamente, en
excavaciones realizadas en Uruk se han encontrado
extrañas (p.227)
listas de nombres designando las cosas y las acciones
más simples, tales como casa, pájaro, fuego,
templo, dios, cielo, lluvia, etcétera. Son como las
cartillas con que un maestro enseñase a
mentalidades muy primitivas:
-- ¿Lo veis? Así se llama esto, y así
lo otro.
Ayuda a regiones subdesarrolladas se llama esa figura.
["Copias" de una
dinastía de los sumerios - y nada es preciso]
¿Reales listas de
reyes?
|
|
Reyes sumerios,
dibujo [10]:
1. Enlil -
2. Ninurta -
3. Nennar / Sin -
4. Ishkur / Adad -
5. Nergal -
6. Gibil -
7. Marduk -
8.-11. Irnini / Ishtar como gobernante
poderosa (8), como bruja (9), como guerrero
(10) y como pilota (11)
|
¡Bien mirado, todos esos quebraderos de cabeza son
innecesarios! Hacia 1953-1730 a.d.C., mientras reinaba en
"Isin" (la antigua ciudad sagrada al sur de Babilonia) la
primera dinastía, se estaba compilando ya una
cronología del pasado mediante las llamadas "LISTAS
DE REYES". De ellas se han conservado copias, dado que el
sacerdote babilonio "Beroso" se encargó de
traducirlas al griego - con algunas libertades debidas a
la fantasía - hacia el siglo IV o III a.d.C. En
cualquier caso, tenemos ahí una escalera
transitable que nos lleva hasta un pasado muy remoto.
Pero...
Asombro, éxtasis y
confusión [listas de reyes "A" y "B"]
En 1932 los sumerólogos quedaron en estado de
asombro, éxtasis y confusión. Habían
aparecido en KHORSABAD, ciudad iraquí cercana a
Mosul, en el valle del Tigris, las listas de reyes
ORIGINALES. Ahora se podía trabajar con nombres y
fechas auténticos.
La más antigua y la más exacta de las listas
de reyes es la designada en la bibliografía de la
especialidad con el nombre de PRIMERA CRONOLOGÍA DE
REYES BABILÓNICOS "WB 444". Se halla en un bloque
poligonal de 20,5 centímetros de alto: suficiente
para llevar la misteriosa serie de los REYES PRIMITIVOS
hasta la lejana época de la creación del
hombre.
La continuación se denomina REYES
BABILÓNICOS, LISTA "A". Su comienzo, con los
nombres y fechas de la primera dinastía,
está ilegible. Pero esto lo remedia la REYES
BABILÓNICOS, LISTA "B", que también contiene
los nombres de los reyes de la primera dinastía
(1830-1530) de Babilonia. Con lo cual podemos conocer, en
la medida de lo legible - el tiempo, ese roedor
infatigable, siempre (p.228)
hace de las suyas -, los nombres de los soberanos sumerios
y babilonios, así como las fechas en que reinaron.
Así pues, el afortunado hallazgo de las listas de
reyes, ¿solucionó el problema
histórico de los sumerios? ¡Ni hablar! Con
ellas, precisamente, empezaron los disgustos.
Diez reyes primitivos en
la "WB 444"
Según la "WB 444", entre la creación de la
Tierra y el Diluvio reinaron diez monarcas durante un
total de 456.000 años. Sí, léalo otra
vez, ¡no es una errata! En letras; cuatrocientos
cincuenta y seis mil años. Después del
Diluvio "la realeza volvió a bajar de los cielos".
Y los veintitrés reyes que se sucedieron luego en
el trono totalizaron todavía 24.510 años,
tres meses y tres días y medio de reinado, que no
son pocos años.
Aunque según la lectura oficial, las listas de
reyes son "índices, ordenados por dinastías,
de los reyes y de sus períodos de reinado" (nota
45: Ceram, C.W.: Götter, Gräber und Gelehrte
[Dioses, tumbas y sabios]; Hamburgo 1951), se convino en
que había allí algo que no cuadraba.
Únicamente Sir Wooley, mientras seguía
excavando afanosamente el suelo de Sumer, confiaba en las
listas de reyes aunque no supiera darles una
explicación (nota 43: Wooley: Ur, cit). Las fechas
de los reinos eran DEMASIADO astronómicas para
nuestros arqueólogos.
Admitamos que con arreglo a las ideas tradicionales, no
dan una información fiable.
Pero antes de pasar a exponer mis especulaciones sobre tan
abstrusos períodos de reinado, daré a mis
lectores una muestra de lo que contienen las listas
reales. Me limitaré a seleccionar sólo
algunos nombres y reinados, pues la nómina de todos
los soberanos hasta el origen del hombre llenaría
muchas páginas, lo cual sería pesado e
innecesario para el tema que nos ocupa.
Nombres y números
del banco de datos
Ejemplos de la lista de reyes "WB 444":
<Cuando la realeza
descendió del cielo la realeza tuvo su sede en
Eridu. Fue rey de Eridu Alulim, que reinó durante
28.800 años.
Alalgar reinó durante 36.000 años. 64.800
años reinaron esos dos reyes.
En Bad-tibira reinó 43.200 años (p.229)
En-men-lu-anna, y En-men-gal-anna reinó 28.800
años.
El dios Dumuzi, el pastor, reinó 36.000
años. Esos tres reyes reinaron en total 108.000
años.
En Larak reinó En-zib-zi-anna durante 28.800
años, este rey, su reinado fue de 28.800
años
El rey de Sippar fue En-men-dur-anna, 21.000 años
duró su reinado, este rey reinó durante
21.000 años.
En Suruppak reinó Ubar-tutu durante 18.600
años. Cinco ciudades, ocho reyes, en total
reinaron durante 241.200 años.
Todo se lo llevó el Diluvio.
Cuando hubo pasado el Diluvio y la realeza
descendió (nuevamente) del cielo, la realeza tuvo
su sede en Kish. El rey de Kish fue Ga-ur, que
reinó 4.200 años.
Gulla-Nidaba-anna-pad reinó durante 960
años.
Zukapip reinó durante 900 años.
600 años fueron el reinado de Atab.
El hijo de Atab reinó durante 840 años.
ETANA, el pastor, que ascendió a los cielos, el
que consolidó las tierras, fue rey, 1.560
años fueron su reinado.
Balih, hijo de Etana, reinó 400 años.
Tizkar, hijo de Samug, reinó 305 años.
Ilku reinó 900 años.
Ilta-sadum reinó 1.200 años.
(Mes-kiag-ga(ser), hijo del dios del Sol, fue gran
sacerdote (y rey), y fue de 324 años (su
reinado).
El divino pastor Lugal-banda reinó durante 1.200
años.
El DIOS Dumu-zi, el pescador cuya ciudad fue Kua,
reinó durante 100 años.
El divino GILGAMESH, hijo de un demonio Lillu,
reinó durante 126 años.
Ur-nungal, hijo de GILGAMESH, su reinado fue de 30
años.
Utul-kalamma, hijo de Ur-nungal, reinó durante 15
años.
Lebaser reinó 9 años.> (p.230)
Las listas de reyes son también, en parte, listas
de dioses. En ellas figuran reyes que no sólo
recibieron de los sumerios honores divinos, sino que
además estaban reconocidos como maestros.
Gilgamesh, Etana y Enkidu son héroes de las famosas
epopeyas que llevan sus nombres.
Los nombres de los soberanos reseñados en las
listas se repiten en otras tablillas cuneiformes y en los
sellos de los materiales de construcción: otra
prueba de que las listas no son producto de la
fantasía de este o aquel cronista aislado. Los
reyes existieron, su actividad cotidiana se comprueba
porque dejaron "constancia" documental de ella.
[¿Cómo
explicar los reinados largos? Schmidtke indica que
sólo son "leyendas"]
Ahora bien, ¿qué pueden significar esos
reinados fantásticamente largos de las cabezas
coronadas?
Friedrich Schmidtke refleja bien la confusión de los
sumerólogos (p.230) (nota 46: Schmidtke, Friedrich:
Der Aufbau der Babylonischen Chronologie; Münster
1952):
<Desde luego, a primera
vista se interpreta que estas dinastías se
habrían sucedido unas a otras, pero ello nos lleva
a consecuencias inadmisibles, por lo que se refiere a la
duración de la historia sumeria.>
En los círculos especializados, muchos se preguntan
qué motivos pudieron tener los cronistas para citar
"tan desaforadas cifras". (nota 46, cit.) Antes de pasar a
presentar las tablas de nombres y reinados de los monarcas
sumerios y babilonios, el profesor Schmidtke da libre curso
a su resignación:
<Lo que se lee en el período ANTERIOR de la WB
pertenece al dominio de la leyenda y no nos ocupará
aquí, por más que sea de gran interés
para la historia de las religiones lo que dice, sobre todo
en relación con las dinastías
antediluvianas.>
Verdaderamente, las fechas en cuestión sorprenden,
pero, ¿es esto motivo para relegarlas al reíno
de las fábulas y leyendas? Así todo queda
arreglado de una manera muy sencilla. Lo que no se puede
interpretar a primera vista, pasa a vía muerta y
acaba en el depósito de "fábulas y leyendas".
Sobre la edad
bíblica y la inmortalidad [ejemplos de largas
vidas]
La "WB 444" registra a DIEZ REYES PRIMITIVOS desde la
creación de la Tierra hasta el Diluvio. En total
reinaron 456.000 años.
La Biblia cita a DIEZ PRIMEROS PADRES (nota 45: Ceram, C.W.:
Götter, Gräber und Gelehrte; Hamburgo 1951) desde
la creación de Adán hasta el Diluvio.
También estos señores disfrutaron de una
envidiable longevidad.
Pablo Picasso, que tuvo a su hija Paloma a los sesenta y
ocho años, era un jovencito en comparación con
Adán, el primer hombre a quien se atribuye la
procreación de su primer hijo a la edad de ciento
treinta años. Y en comparación con
Adán, quien según se dice pasó de los
novecientos años de vida, Picasso a los noventa y dos
murió prácticamente en la flor de la
adolescencia.
Longevidades aún más asombrosas se citan, como
la de Enoc, el profeta antediluviano y séptimo de los
diez primeros padres: a la edad de trescientos sesenta y
cinco años fue "arrebatado hacia los cielos", es
decir que no murió. Su hijo Matusalén (p.232),
el que anunció el Diluvio, falleció a la
provecta edad de novecientos sesenta y nueve
años pero, eso sí, sobre la tierra.
¿Dónde se
sitúa el tope de la especie humana? [15 mil
millones de células]
Si consultamos a los gerontólogos sobre la
credibilidad de tan enormes longevidades, especialistas
norteamericanos y rusos se pondrán de acuerdo para
decirnos que la naturaleza ha limitado los años del
hombre a ciento diez o ciento veinte. Las repetidas noticias
sobre legendarios pastores búlgaros que alcanzan
ciento cincuenta o más años, y demás
por el estilo, suelen ser relegadas por estos
científicos al reino de la fábula: cuando se
entra en averiguaciones sobre estas celebridades locales
resulta que no aparecen partidas de nacimiento u otra
documentación, como base elemental de tales
pretensiones, que no se atienen a otra referencia sino a los
recuerdos de la bisabuela.
La duración de nuestra vida depende del
funcionamiento de quince mil millones de células
corporales. A lo largo de la existencia estas células
se dividen, con lo cual el organismo se reconstruye y
transforma sin cesar. Con cada división celular nos
aproximamos lentamente a nuestro fin, ya a partir del
segundo decenio de la vida, pues la vitalidad se agota al
cabo de unas treinta, o como máximo cincuenta
divisiones.
Incluso la posibilidad biológica y la esperanza de
vida humana con ciento diez a ciento cincuenta años,
hasta hoy no es más que un afán y un
sueño de "longevidad bíblica"... hasta que la
investigación gerontológica consiga frenar la
degeneración de los tejidos. Y los investigadores que
ha estudiado tejidos momificados de épocas muy
antiguas afirman que la especia humana JAMÁS se ha
regido por otras leyes diferentes.
¿Ficción o
verdad? [el enigma de años en la lista de reyes - y
unos reinaron algunas veces con "pausas" como parece]
Por cuanto conozco estos hechos indiscutibles, no puedo
dejar de preguntarme por qué los cronistas sumerios y
babilonios "atribuyeron" a sus antepasados unas edades tan
astronómicas que, como confirma la más moderna
investigación, no pudieron alcanzar en ningún
caso.
Sir Charles Leonard Woolley encontró en la colina de
(p.233) "El Obeid" (p.233-234),
o sea en el yacimiento de Ur de Caldea, una tabla de piedra
caliza con la siguiente inscripción:
<Dedicado por
A-anni-tadda, rey de Ur, hijo de Mes-anni-padda, rey de
Ur.> (nota 43: Woolley, Sir Charles L.: Ur in
Chaldäa; Wiesbaden 1956)
El mencionado Mes-anni-padda no es otro sino el que aparece
en las listas de reyes como fundador de la tercera
dinastía después del Diluvio.
Lo más asombroso de las listas de reyes es que
algunos nombres se repiten en diferentes épocas y
diferentes dinastías, como si hubieran reinado varias
veces, y se hubieran tomado intervalos de vacaciones durante
algunos siglos o incluso milenios.
[El rey Nabu-na'íd]
Un ejemplo: sobre una tabla encontrada en el templo solar de
"Sippar", el rey neobabilonio Nabu-na'id (555-538 a.d.C.)
afirma:
<Para el dios del Sol,
juez de cielos y tierra, yo construí el templo del
Sol, su casa en Sippar, que había sido empezada por
uno de mis predecesores, el rey Nebukadnedsar, quien
buscó la antigua acta fundacional, pero no pudo
encontrarla. Durante aquellos cuarenta y cinco años
se hundieron los muros de la casa, lo cual me llenó
de espanto, haciéndome caer al suelo, y se
demudó mi rostro.
Mientras retiraba la imagen del dios, sacándola de
aquel templo para llevarla a otro templo, hice derribar
los restos de aquella casa y busqué la antigua acta
fundacional, y excavé la tierra dieciocho codos de
profundidad, y hallé el acta fundacional de
Naram-sin, hijo de Sargón, que durante tres mil
doscientos años, no pudo ser hallada por
ningún rey: a mí me fue concedido por el
dios del Sol y gran Señor del Templo el poder
contemplarla... (Los puntos suspensivos indican una laguna
del texto, por ilegible).
Entonces edifiqué sobre el acta fundacional de
Naramsin, hijo de Sargón, los bien escuadrados
sillares.>
El rey Nabu-na'id deja dicho, sin lugar a dudas, que
según el acta fundacional tan afanosamente buscada y
por último encontrada a dieciocho codos de
profundidad, el templo del Sol fue construido primeramente
por su real antepasado Naram-sin (p.234), tres mil
doscientos años ANTES (es decir, hacia el 3800
a.d.C.).
Cosa notable, EL MISMO "Naram-sin" - a´si como su
padre SARGÓN -, en las listas de reyes vuelven a
aparecer en época muy distinta.
[El rey Hammurabi]
Otro ejemplo: según las listas de reyes A y B,
HAMMURABI reinó unos setecientos años antes
que el rey Burnaburias I. Los sumerólogos excluyen
por completo que esto pueda ser verdad.
<También el dato
de que Hammurabi haya vivido setecientos años antes
que Burnaburias es por completo imposible.> (nota 46:
Schmidtke, Friedrich: Der Aufbau der Babylonischen
Chronologie; Münster 1952)
Imposible, ¿por
qué? ¿Acaso no lo aseguran unas listas de
reyes, escrupulosamente llevadas?
Sobre las tablillas cuneiformes encontradas en muy numerosos
lugares se eternizan los nombres de diferentes reyes. Lo
cual constituye la prueba irrefutable de que dichos reyes
reinaron de verdad. Pues se trata de inscripciones que
tienen carácter de documentación oficial, es
decir, pública.
Por otra parte, las listas de reyes expresan qué
reyes hubo y desde qué año hasta qué
año, es decir, quién mandaba en cada momento.
¡Y aquí empieza el divertido juego del
escondite!
Mediante honrados esfuerzos, los sumerólogos procuran
establecer la sucesión cronológica exacta de
las dinastías, con sus reyes. Hallada entonces
cualquier inscripción en cualquier lugar, creen
determinar el reinado de UN REY. Queda asentada UNA fecha, y
de ahí se deduce una secuencia cronológica
ascendente y descendente.
[Los reyes se repiten en
las listas]
X-Y-Z
Al rey X le sucedió el rey Y. El rey Y fue muerto en
una batalla por el rey Z. De aquí se infiere que el
rey X hubo de ser ANTERIOR al rey Z.
¡Y entonces es cuando la Historia remota les juega una
mala pasada a los laboriosos investigadores! De pronto, los
reyes X, Y, Z se presentan en otras tablillas con arreglo a
una secuencia diferente y en relaciones totalmente
diferentes entre sí.
¿Qué hacer para no tener que derribar los
árboles genealógicos (p.235)
que tanto costó alzar y que ahora amenazan con
pudrirse?
Pues uno hace lo que suelen hacer los arqueólogos en
semejantes circunstancias: ¡echarle la culpa al
antiguo cronista! ¡Si es que no sabían lo que
hacían! No sabían contar, o confundieron el
orden relativo de los reyes y las fechas. A lo que parece,
aquella gente era un poco torpe.
Una vez escuchada esta explicación no poco forzada,
faltaría saber cómo en diferentes tablillas de
las listas reales originales coinciden nombres y fechas
rigurosamente. Tampoco se comprende que en el Antiguo
Testamento dejasen actuar también a historiadores
manifiestamente ineptos, según resulta de la
relación de los diez primeros padres antediluvianos.
¿Bebieron de la
misma fuente?
A primera vista no me parece tan descaminado suponer que en
uno y otro caso hubiesen actuado LOS MISMOS cronistas. El
relato bíblico y la investigación
histórica coinciden en admitir que el joven
Moisés, el que más adelante sería el
liberador de Israel y fundador de la religión
yaveística, creció y fue educado en la corte
de un faraón. Por consiguiente, tuvo acceso a las
cuidadas bibliotecas del milenio segundo a.d.C.
¿Tal vez Moisés [los escribientes de los
libros "Moisés"] leyó [leyeron] las listas de
reyes sumerios? Quizás almacenó los datos en
su proverbial memoria, transmitiéndose luego los
mismos por tradición oral. Pero en tal caso,
¿por qué no se conservaron para los diez
primeros patriarcas bíblicos LAS MISMAS fechas que
rigen para los diez "reyes primordiales!" según los
escribas sumerios?
Aunque sea lícito especular con la idea de que los
autores sumerios y bíblicos recurriesen a las mismas
fuentes, después de una profunda reflexión no
queda más que esto: las astronómicas y
fantásticas longevidades que se atribuyen a los
primeros reyes y patriarcas. No poseemos suficientes datos
para explicar el fenómeno.
Tres explicaciones
atrevidas
[Tesis 1. reyes fueron
invitado para volar con extraterrestres a otros sistemas
solares - ejemplos de viajes solares]
Me gustaría traer a colación tres ensayos
especulativos de explicación (p.236):
1. Los antiguos reyes eran invitados por los
extraterrestres, de vez en cuando, a visitar otros sistemas
solares.
Pueden leerse descripciones de tales viajes y de las
sensaciones experimentadas por el protagonista en el Zohar,
principal libro de la tradición judía
(Cábala), así como en el libro del patriarca
Enoc, incluido en el canon de la Iglesia paleocristiana de
Abisinia.
Incluso el historiador de la técnica, profesor
Richard Hennig, calificó a ciertos pasajes de la
epopeya sumeria de ETANA como "la más antigua leyenda
aeronáutica del mundo": recogida en escritura
cuneiforme entre el 3000 y el 2500 a.d.C., el viaje
aéreo que describe aparece representado además
en numerosos sellos cilíndricos. La epopeya de
Gilgamesh, de origen también sumerio, describe el
viaje fantástico del héroe titular hasta la
sede de los dioses.
Los viajes en volandas a mundos lejanos no son una exclusiva
de la fantasía mesopotámica. Se hallan, con la
misma precisión, en la epopeya nacional de la India,
que es el Mahabharata y cuyo origen se sitúa, como el
del Ramayana, entre los siglos IV y III a.d.C. Aparecen en
los mitos nórdicos y en las tradiciones de los indios
norteamericanos. No hay sociedad nacional de autores que
tenga derechos sobre los viajes por el cielo en
compañía de los dioses.
[El tiempo en otros
sistemas no es tan rápido como en la tierra - y los
reyes fueron dioses extraterrestres]
Incomprensible casi, pero
cierto
Desde que Albert Einstein (1879-1955) desarrolló su
"teoría especial de la relatividad", las longevidades
expresadas en cifras monstruosas admiten explicación.
En cuanto a la teoría de Einstein, ha sido elevada a
la categoría de los hechos probados mediante
experimentos físicos irrefutables.
La ley inmutable de la relatividad dice, en cuanto al
tiempo, que para los astronautas de un navío
interestelar que volase a una velocidad próxima a la
de la luz, el tiempo transcurriría mucho más
DESPACIO que para los observadores estacionados en tierra,
en el centro espacial. Ni más ni menos.
Desde Einstein, "el tiempo" ya no es una magnitud fija, sino
que puede manipularse a través de la energía
(=velocidad). Sabiendo esto, ¿cómo quedan las
incomprensibles fechas de las listas de reyes sumerias?
Las inscripciones sumerias que se han conservado hasta
(p.237)
llegar a nosotros no hablan, ni por asomo, de banales
acontecimientos de política exterior - cuyo hilo no
habría llegado a nosotros a través de tantos
milenios -, sino de acontecimientos tan pétreos como
construcciones de palacios o erecciones de templos,
evidentemente construidos para los "dioses" que
vivían entre ellos. Eso es lo que refieren, en estilo
seco y conciso, y no debe sorprendernos sabiendo que los
reyes sumerios se consideraban meros lugartenientes de los
"auténticos" dioses. Estos "dioses" delegaron
personalmente en los reyes, y después del Diluvio
universal se repitió la ceremonia. Cuando se
retiraron las aguas y apareció la tierra deshabitada,
"la realeza volvió a bajar de los cielos", como dice
la lista de reyes.
Una vez aceptado esto como realidad, ya no es tan absurdo
que los reyes-dioses tuvieron que ser, o los mismos
extraterrestres, que de vez en cuando se los llevaban de
viaje por otros sistemas.
Asociando las "inverosímiles" cifras de los reinados
sumerios con la aseveración de que la realeza
bajó del cielo, podemos sospechar que ya entonces
había más cosas en el cielo y en la tierra que
las que sueña nuestra sabiduría.
Una vez conocidos los efectos naturales del corrimiento
relativista de las escalas cronológicas, los 456.000
años de los diez primeros reinados no nos asombraran
tanto. ¡Una bagatela!
¡También es un
buen método!
[Tesis 2: Fueron reyes
inmortales porque fueron extraterrestres - y los
"semidioses" fueron mortales]
2. Los extraterrestres (los dioses), en gustoso
aparejamiento con las terrestres, procrearon hijos e hijas.
Así lo asegura el profeta Enoc. Así lo dice el
papiro de Lamech, con sus más de dos mil años
de antigüedad, hallado en 1947 en la colonia de Chirbet
Qumran, junto al mar Muerto.
El dios sumerio Enlil, que fue rey de Nippur, sedujo y
dejó embarazada a la hermosa Ninlil.
También el Génesis nos habla de uniones entre
los "hijos de los dioses" y las "hijas de los hombres".
Si hubiera sido posible llevarlos al diván del
psicoanalista, los productos de tan extraordinarios
apareamientos habrían podido contarnos, sin duda,
conflictos espirituales asombrosos. Como engendros de un
insólito mestizaje, envidiarían a sus
progenitores "divinos", entre otras cosas por su aparente
inmortalidad (p.238):
pues todas las tradiciones coinciden en señalar que
los dioses eran inmortales; mientras que ellos, los
"semidioses" tenían que compartir el sino de los
terrestres mortales.
Los vástagos "divinos" engendrados sobre la Tierra
pasaban a ser mortales, porque después de la partida
definitiva de los extraterrestres ya no tenían
ocasión de participar en vuelos interestelares a alta
velocidad. De este modo quedaban sometidos al proceso normal
de envejecimiento, como los demás.
La hierba de la
inmortalidad [todavía no es encontrada para los
hombres]
Muy comprensible parece que los hijos de los dioses se
rebelasen contra esa situación, que no quisieran
compartir la suerte vulgar y tratasen de reinar el mayor
tiempo posible, disfrutando de la adoración de los
humanos. Ya entonces los gobernantes apreciaban la
erótica del poder.
A la vista de la literatura sumeria, brotan del marasmo de
los misterios sin resolver las preguntas siguientes:
¿Qué era el paraíso sumerio de Dilmun,
aquel jardín divino en donde no existían "ni
la enfermedad ni la muerte"?
¿Qué era aquella "hierba de la inmortalidad"
cuya existencia conocía Ut-napishtim, el antepasado
del héroe Gilgamesh que vivía en una isla
"más allá del Mar de los Muertos" y era, a su
vez, inmortal? ¿Qué era esa "planta de la
eterna juventud"?
Ut-napishtim, sobreviviente del Diluvio, la conocía y
le confió el secreto a Gilgamesh , diciéndole
que la inmortalidad estaba contenida en una planta del mar
de aguas dulces. Gilgamesh consiguió la hierba y
quiso que la comieran sus allegados. Pero durante el viaje
de vuelta, mientras estaba metido en una fuente para
purificarse, vino una serpiente y le robó aquel
tesoro inapreciable. Gilgamesh lloró.
¿Quizá los hijos de los dioses o los primeros
padres conocieron medicamentos capaces de frenar la
degradación de las células? ¿Preparados
con la propiedad de prolongar la duración de las
funciones vitales?
Hasta hoy, la hierba de la inmortalidad no ha vuelto a ser
hallada. La moderna geriatría sigue buscándola
para nosotros.
[Tesis 3: Los templos
fueron para los dioses - y después para los
semidioses - y después para los descendientes, los
reyes]
3. Cabe también que los hijos de los dioses y / o
reyes primitivos se sometiesen a la momificación en
baños conservantes, bajo la vigilancia de los
sacerdotes, para despertar otra vez al cabo de varios siglos
(p.239).
¿Tal vez dominaban los métodos de la
hibernación a muy bajas temperaturas, evitando la
cristalización de las paredes y núcleos
celulares, que es el inconveniente contra el cual se han
estrellado todos nuestros experimentos en tal sentido?
¿No será esa la razón de las reiteradas
pretensiones, según las cuales los "dioses" se
hallaban realmente "presentes" en el templo?
Los sacerdotes de las castas superiores sabían que
los dioses vivían personalmente entre ellos, que eran
los verdaderos propietarios de las ciudades y que los reyes
no eran sino delgados para los asuntos corrientes de la
administración (nota 47: Bondi, Hermann: Die Wiege
stand im Orient; Munich 1971). Los sacerdotes temían
tanto el retorno de los dioses extraterrestres como el
despertar de los semidioses dormidos.
Por consiguiente, los primitivos templos eran
AUTÉNTICOS lugares de encuentro con AUTÉNTICOS
dioses físicamente presentes. No fue sino mucho
más tarde, cuando los dioses ya no regresaron
más y los durmientes semidioses dejaron de volver en
sí de sus sueños, que los sacerdotes
procuraron mantener su ascendiente sobre los reyes y el
pueblo mediante trucos de muy diversa naturaleza.
Sería entonces cuando erigieron estatuas en los
templos en figura y representación de los soberanos
celestiales.
Quizás exista un camino a través de estas tres
especulaciones, por donde se pueda llegar a explicar el
misterio de la lista "WB 444". Son demasiado detalladas las
informaciones que contiene ese banco de datos.
Fin del texto