de: Israel Finkelstein / Neil A.
Silberman: "La biblia desenterrada". Aquí fue usado
la versión alemán: "Keine Posaunen vor Jericho. Die
archäologische Wahrheit über die Bibel"; edición Deutscher
Taschenbuchverlag DTV GmbH & Co. KG, Munich 2004,
segunda edición 2005; la versión original del libro está
en inglés: "The Bible Unearthed. Archaeology's New Vision
of Ancient Israel and the Origin of Its Sacred Texts";
edición "The Free Press, a division of Simon &
Schuster, Inc.", 2001; la primera versión alemana vino de
la edición C.H.Beck oHG, Munich 2002
Los teólogos de un "Dios"
tienen que justificar los eventos y revisan los libros
Los teólogos de la religión de 1 dios
tienen que mentir mucho ahora porque ninguna profecía fue
cumplida:
-- la promesa de un reino judío grande no
fue cumplida (p.335)
-- los sacerdotes tienen que explicar la
destrucción de Jerusalén (p.332)
-- además se tiene que explicar la
pregunta por qué el rey Josías - de lo cual fue dicho que
fue un santo - por qué él no fue exitoso para salvar
Jerusalén para siempre (p.325)
-- y para la destrucción del reino de Judá
se tiene que encontrar un sentido teológico porque la
promesa eterna para un "país santo" tampoco sale con Judá
más (p.325)
-- la comunidad en Yehud tiene que ser
unificada alrededor del templo
-- los sacerdotes tienen que distribuir
nueva esperanza para un mejor futuro
-- la provincia de Yehud tiene que
arreglar sus relaciones nuevas con sus vecinos en el norte y
en el sur
-- también se tiene que arreglar problemas
internas
-- los sacerdotes tienen que encontrar una
explicación por qué el territorio presuntamente prometo es
ocupado ahora (p.332)
-- así las reivindicaciones territoriales
contra terreno vecino no se terminan [y así siempre salen
los vecinos como enemigos, es lógico]
-- y los sacerdotes tienen que encontrar
nuevas razones por qué los libros deben tener valor todavía
aunque fue un desastre completo con la destrucción de
Jerusalén (p.333)
[en lugar de abrogar esos libros].
Por eso los sacerdotes escriben nuevos
textos, y esos textos adicionales tienen el título
"Escrituras de Sacerdotes" (inglés: "Priestly Sources", P).
La nueva versión del Pentateuco describiendo el Moisés
inventado con un Judá destruido
La literatura maestra con la epopeya
popular del siglo VII a.C. es cambiado en un libro mundial
como un recuerdo para todo el mundo (p.12). Los 5 libros de
Moisés son revisionados "en el tiempo después del exilio"
(p.24) y son finalmente redactados (p.332).
El científico bíblico Richard Friedman
indica que Esra mismo habría redactado el Pentateuco como
ultima persona, porque él - ese Esra - se indica sí mismo
como "sacerdote y diputado para la ley del dios del cielo"
(Esra 7,12) (p.332).
Los sacerdotes redactan muchas nuevas
escenas del Pentateuco como partes nuevas (p.335).
La invención de la segunda versión de la
Obra Deutoronómica - afirman que toda la población tendría
la responsabilidad
Durante la invención de las Escrituras de
Sacerdotes (Priestly Sources, P) siempre nuevas partes de
los "libros santos" con creados:
-- el libro de Jeremías sobre la vida
después de la destrucción de Judá (p.317)
-- el libro de Ezequiel sobre la
deportación y el tiempo de las esperanzas en Babilonia
-- los libros Esdras, Nehemías, Jagai y
Zacarías sobre la vuelta de la deportación (p.317)
-- indicaciones adicionales en la crónica
a partir de Josías hasta a la derrota del reino de Judá por
Nabucodonosor (p.324) con la muerte de Josías
-- textos sobre los últimos cuatro reyes
en Jerusalén
-- textos sobre la destrucción de
Jerusalén y sobre la deportación con la explicación por qué
la destrucción de Jerusalén hubiera sido inevitable (p.325)
(libro 2 Reyes 23,26 hasta 25,21) (p.325).
Los textos aditivos de otro escritor son:
-- la promesa que ha recibido David - como
dicen - es completado con nuevas condiciones (libro 1 Reyes
2,4; 8,25; 9,4-9) (p.325)
-- complementan el texto con predicciones
malos como preparación para la destrucción de Jerusalén
(p.e. libro 2 de Reyes 20,17-18) (p.325)
-- rey Manasés es declarado como
responsable para todo porque ahora a partir de la
destrucción de Judá va a valer nueva "norma" para Jerusalén
(libro 2 de Reyes 21,10-15) (p.325)
-- inventan la afirmación que la justicia
del rey de Josías solo ha alargado el tiempo para la
destrucción de Jerusalén, y jamás fue la pregunta sobre una
salvación porque dicen que la profeta Hulda habría afirmado
que Jerusalén debería desarrollarse como maldición y va a
venir la destrucción, pero el rey Josías no va a ver eso más
(libro 2 de Reyes 22,18-20) (p.326)
-- de un momento a otro la responsabilidad
para el comportamiento de Dios no depende más del rey, pero
depende de cada habitante si Jerusalén va a ser destruido o
no: la alianza entre la dinastía de David y Dios es
remplazada por la alianza entre la población y Dios [ver
"Libro de la Alianza"] (p.326)
-- dicen que el rey deportado Joaquín en
Babilonia fue despedido y dicen que había vivido todavía una
vida buena con el rey Evilmerodac en Babel (libro 2 de Reyes
25,27-30) (p.325, 3269
-- a partir de ese momento de la invención
de los nuevas escritos vale otra promesa: Cuando el pueblo
está fiel a Dios, así la promesa que fue dado a David [la
fundación de un reino] puede ser reanimado (p.327).
Y otra "crónica" más es creada
La "crónica" refleja la ideología y las
necesidades del templo de Jerusalén en la provincia de
Yehud, parcialmente con cuentas históricas con contenidos de
los libros de los Reyes (p.25).
La versión definitiva es escrito en el
siglo V o IV a.C., unos 100 años después de los eventos
descritos. Es una cuenta unilateral a favor de las
exigencias históricas y políticas de la dinastía de David y
de Jerusalén, y el norte prácticamente no es mencionado
(p.25).
Nuevos
libros de profetas de Jagai y de Zacarías
Según Finkelstein / Silberman ahora en el
Judá destruido también son escritos los libros de profetas
de Jagai y de Zacarías (p.328).
"Idumea"
es luchado con nuevas indicaciones geográficas
Los sacerdotes no quieren aceptar la nueva
región de los Edomitas ("Idumea") y la frontera del sur de
la provincia de Yehud que fue movido al norte, y por eso
inician una guerra propagandista contra los edomitas:
-- los sacerdotes ahora afirman que los
patriarcas del judaísmo serían enterrados en la cueva de
Hebrón, y así al menos sigue una ocupación mental judía de
la región
-- para presentar los israelitas como
gente más civilizada que los pueblos vecinos, los escritores
inventan un patriarca Abrahán y dicen que es de la ciudad de
Ur, una ciudad cosmopolita y famosa (Genesis 11,28; 11,31).
En esos tiempos la ciudad de Ur es una sede de
intelectualidad y como lugar de nacimiento provoca una buena
reputación (p.334).
¿Pero qué
dicen los archivos? Justamente en la mitad del
siglo VI a.C. la ciudad de Ur es reactivado por el rey
babilónico o Caldea - Nabonid - como centro religioso
(p.334-335).
La nueva identidad con nuevos "libros
santos" falsos
Los sacerdotes siempre presentan esos
nuevos libros inventados fingiendo una identidad a la
población judía de la provincia pequeñita de Yehud - y esa
identidad es absolutamente falsa lo que es bien probado. Los
sacerdotes manipulan la población y la "unen" de esa manera
con esos libros manipulados e inventados (p.335).